La alternativa de reducir la crisis del precio del petróleo, provocada por una sobreproducción mundial de crudo, que se ha mencionado en los últimos días, está en veremos.

Según informe de Goldman Sachs, es "altamente improbable" que se implementen recortes a la producción de crudo coordinados entre los miembros de la OPEP y Rusia, ya que un acuerdo requeriría una mayor cooperación entre los integrantes del bloque por el elevado bombeo de Irán y su enfrentamiento con Arabia Saudita, señala Goldman Sachs.

Asimismo, una reducción coordinada de los niveles de suministro podría ser perjudicial, ya que los precios más altos como resultado de la medida podrían generar una reactivación de la producción de gas de esquisto, indicó el banco.

Los precios del petróleo repuntaron la semana pasada desde mínimos de 12 años, ante los indicios de conversaciones entre funcionarios rusos, autoridades de Arabia Saudita y miembros de la OPEP para reducir la producción en hasta un 5 por ciento.

El crudo tendría que negociarse entre 40 y 20 dólares por barril en el primer semestre del 2016 para permitir una disminución de los suministros que finalmente genere un equilibrio del mercado, indicó Goldman. "Reiteramos nuestra postura de que los precios deben permanecer los suficientemente bajos como para forzar los fundamentos a crear un ajuste que permita un regreso al equilibrio (del mercado)", dijeron analistas del banco en una nota.