Así lo dejó entrever el presidente de la empresa, Juan Carlos Echeverry, quien aseguró que la decisión definitiva en este sentido la tomará la junta directiva, organismo que se encargará de presentarle a la asamblea de accionistas la propuesta de repartición de ganancias del 2015.

Esto significa que los 400.000 particulares que tienen acciones de la petrolera no recibirían, en esta oportunidad, ni un solo peso correspondiente a las utilidades generadas por la empresa el año pasado. Echeverry dijo que es clave que los accionistas, incluido el Gobierno, discutan sobre la conveniencia o no de pagar dividendos en los próximos meses.

"Nuestro accionista principal, el Gobierno, ha dicho que este año no esperamos que Ecopetrol nos distribuya ganancias y ha expresado todo el apoyo a la empresa, lo que se asume como un respaldo muy fuerte a esta decisión".

El funcionario indicó que "todos nos tenemos que apretar el cinturón. Los empleados, las 9.800 personas que trabajamos en la empresa nos bajamos el sueldo en 30 por ciento. Estamos recuperando valor para la compañía con el objetivo de hacerle frente a la caída de los precios del petróleo".

El presidente de Ecopetrol le dijo a la Caracol Radio que la empresa es viable y rentable, y que los costos de sacar el crudo rondan los tres dólares, pero que transportarlo a Cartagena o a los puertos cuesta unos 15 dólares, es decir que el negocio sigue siendo atractivo. Sin embargo, admitió, que cuando se suman los costos corporativos, la situación cambia.

"Estamos reduciendo costos. Solo en enero, nos propusimos una meta de bajarlos en 400 millones de dólares más".

Confirmó que los campos de Rubiales y Quifa se revertirán a las manos de Ecopetrol el próximo 30 de junio, y que estos son pozos rentables y muy productivos.

Echeverry dijo que la empresa solo sacará el crudo que sea rentable e insistió que la compañía es viable, y aseguró que, incluso, recientemente, él compró acciones, con el permiso de la junta directiva.

Sobre el tema de Reficar, Echeverry dijo que harán todo lo que sea posible para reclamar al contratista que le devuelva el dinero correspondiente a los sobrecostos no justificados. Agregó que llevan cuatro meses en una primera fase de negociación y que posiblemente se puedan tomar un par de meses adicionales. "Si no se llega a un acuerdo, iremos a un tribunal internacional en Nueva York, en París o dónde toque, pero vamos a reclamar ese dinero".